Primero, agradecerles a todas las que dejaron sus lindos comentarios en este pedacito de mí. Me sirvieron demasiado, y claro ahora las cosas en lo que respecta a este chico están mucho mejor, quizás no perfectas, pero me conformo con una invitación que él me hizo a su casa, lindo no?. GRACIAS DE VERDAD, SON DIVINAS :).

Ahora a mi entrada...
Soy una verdadera estúpida, sigo tirando mi vida por el baño, y todavía no sé que me lleva a tener esta conducta tan irracional y autodestructiva. Se supone que todos nos alejamos del dolor, nuestro instinto de supervivvencia debería ser más fuerte, pero es obvio que una parte de nosotras falla.
Hace un tiempo atrás (no mucho como para haberlo olvidado) estaba consumida por la depresión, no había nada que pudiera sacarme de ese estado. Era una constante sensación de vacío, lo único que queria en mi vida, era adelgazar a cualquier precio. Me pasaba los días sin comer, estando orgullosa de mis logros y despreciando cada centimetro de mi cuerpo. Pero no era nada feliz, y no paso mucho tiempo para que descubrieran los que me estaba haciendo.
Después de eso, empezó la bulimia, seguia siendo infeliz, pero ahora gorda.
De eso ya hace un año más o menos, (llevo dos años en esto). Hace un par de meses, que el estado de depresión ya no es tan fuerte como antes, y el deseo irracional de adelgazar a desaparecido un poco. Sigue siendo algo que quiero mucho, pero ahora me doy cuenta que no estoy dispuesta a morir por ello. Sí, quiero ser flaca, pero quiero mucho más ser feliz, ser normal, comer sin pensar en calorías.
No voy a negar que he tenido algunos logros, por ejemplo ahora soy capaz del almorzar sin terminar en el baño y hasta algunos días como de lo más normal (aunque siempre queda la culpa).
Pero aún así no puedo dejarlo, es casi como mi manera de vivir. Sentirme ansiosa-comer-vomitar. Y ya no me hace tanto sentido como antes, no puedo dejarlo por que me acostumbré.
Ya no tengo período (y no me hace gracia alguna), mi cuerpo gano los kilos perdidos en grasa y lo peor de todo es que me estoy muriendo.
Pero sigo optimista, algo en mí me dice que si me concentro y pongo de mi parte, puedo acabar con esto, puedo salir adelante.